viernes, 21 de octubre de 2011

Dice...



Dice Gracián que hoy ser sabio cuesta más que antiguamente, y que es más difícil tratar con el otro. ¿Será que con el avance tecnológico nos hemos vuelto tan complicados como las máquinas? Esto lo digo por la dificultad para tratarnos con el otro. En cuanto a la sabiduría lo entiendo, porque la sabiduría la da la vida, la experiencia y el encuentro con uno mismo en el pensamiento.

Hoy vivir se vive, pero contrarreloj, con prisas, y casi sin pensar. Nuestros movimientos a veces se hacen mecánicos, y creo que nuestra mente también. Nos ponemos unos patrones fijos y fáciles con los que podemos tener todo controlado y juzgar al otro. Todo lo que se salga de ahí lo rechazamos y no lo intentamos comprender. Claro, es que comprender al otro necesita un esfuerzo del pensamiento, o de intentar ponerse en su lugar, pero estamos tan ajustados de tiempo, que se nos hace costoso.

Pero es tontería hablar de esto, pensar no divierte, no produce dinero, ni saca billetes gratis para unas buenas vacaciones en el extranjero, o un chalet mono al que invitar a los amigos para que lo admiren como si se tratara de un museo.
Que cosas digo, pensar, comprender…Creo que se borraron ya del diccionario estas palabras.

Sakkarah